31 agosto 2012
BUENO, ES LO QUE TENEMOS
29 agosto 2012
ARTUR MÁS, FALTO DE “HISTORIA” Y DE BUENAS COSTUMBRES
Ahora resulta que a su manipulación histórica obligada por la ausencia de una base firme que la sustente, se une la falta de la más elemental educación, tal y como se muestra en cualquier libro de urbanidad en el que siempre aparece como primera muestra de la misma, tal y como aconsejamos a nuestros hijos desde sus primeros balbuceos, el pedir las cosas por favor y el dar las gracias al recibirlas, sea ante un sencillo caramelo o ante el agradable perfume de una rosa.
28 agosto 2012
EL HECCE HOMMO DE BORJA
Lo sucedido en torno a la indocumentada restauración del sencillo mural del siglo XIX que contempla la faz del Crucificado de Elías García Martínez y su expectación lograda gracias al sector más irreverente, dispuesto en esta ocasión a presentar como berlanguiano vodevil la recuperación del Hecce Hommo del Santuario de la Misericordia de Borja, es más bien como un brochazo, y nunca mejor dicho, de una parte de la España de nuestro tiempo, tan manipulada como utilizada.
Serpiente de verano que como cualquier dato útil, hay que aprovechar y aprovechan.
Quede claro que por mi parte no existe la menor crítica a la desprendida labor de Dña. Cecilia, mujer dolorida por el alcance que ha supuesto su inacabada y querida restauración, la tan afable dama aragonesa.
Sin embargo, sí la tiene el vocerío logrado pese al conocimiento de su provisional estado y a la espera de su restauración final, que, de forma decidida, ha instado a la perpetuidad de su actual estado desde la más lerda de las actitudes, al igual que manifestando una falta de respeto ante el buen gusto, tal y como hemos visto en el programa de Jordi González, quien no pierde ripio para incitar al montaje de un pequeño circo, como en el caso que nos ocupa, ante el sagrado y pequeño templo de Borja, al que ha instado a su visita a sabiendas de la aplazada obra.
Que al fin y al cabo, tal y como estamos en un estado laico constitucional, cualquier causa que derive a su aprovechamiento, está servida. Con mayor razón, si cabe, si es útil para trivializar en ese sentimiento anticlerical que se pretende inculcar, en este caso y como en otros, de forma tan zafia y como sibilina.
27 agosto 2012
ANA PASTOR, SU DESAYUNO DE VICTIMISMO
En cierta ocasión, Pérez-Reverte, periodista y reportero, dijo que se había apartado de su profesional faceta cuando se dio cuenta que había tomado partido por uno de los bandos. Entendía que debía de ofrecerse a la profesión con toda la dignidad que la misma se merecía, es decir contando el suceso y qué cada cual aplicase el color al cristal ante sus ojos. No todos quienes informan al oyente tienen la misma crianza.
Y fue a partir de ese momento cuando su nueva carrera como escritor alcanzara más brillo, pues al verse libre como un pájaro, nos ha ido dejando en el negro sobre blanco lo mejor de sí mismo. Y no sólo con la mejor calidad literaria, sino también con su particular sello periodístico denunciando cuantas acciones canallescas siguen de actualidad. Que también desde los altavoces de las editoriales se puede y debe ejercer la oportuna denuncia.
Pocas veces encontraremos mejor, más sana y a la vez honrada reflexión que la de Pérez-Reverte, para que en corto flash se retrate lo que debe ser un periodista que quiere ejercitar su profesión desde la dignidad y no desde el partidismo.
Que un periodista tome partido y lo ejercite ante las cámaras televisivas en un medio que pretende ser neutral, no hace más que poner en entredicho al medio en el que participa.
Tenemos al caso de Ana Blanco que ante las cámaras de TVE, independientemente del gobierno de turno, sigue ofreciendo la dignidad propia de su profesión, manteniéndose en primer plano ante la cámara desde su primer día, lustro tras lustro y cada vez con mayor profesionalidad y respeto a su público. Su mantenimiento de siempre y en horas de mayor audiencia, aleja toda duda de sospecha sobre su actitud y aptitud en beneficio de su audiencia.
Nada que ver, por supuesto, con la “vedette” Ana Pastor que desde el momento en que ha optado por el victimismo, con su consecuente falta de señorío, nos deja claro que no es oro todo lo que reluce, optando por la búsqueda de una rentabilidad añadida a sabiendas de que la “santa hermandad”, la gran dictadura del siglo XXI en su constante ejercicio de lo políticamente correcto, saldrá en su defensa.
Ay, Ana Pastor, qué pena, penita, pena.
26 agosto 2012
¡Qué país!
24 agosto 2012
“No es eso, no es eso…”
Cualquier persona bien informada y con la suficiente libertad al igual que deseo en juzgar cuanto acontecía en las calles de España de Manuel Azaña, político que en su tarea de gobierno tenía la responsabilidad de ejercer su cargo pero que sin embargo tuvo la firme decisión de mirar hacia otra parte, sabe del peligro que encierra tal dejadez.
Bastantes páginas hay en nuestra historia que nos hablan de ello. Y en especial, en aquellos años en los que más que nunca y con el apoyo de la ciudadanía y el freno de una minoría irresponsable, nuestra nación trataba de reencontrarse así misma, incluso apoyada por la intelectualidad de la época.
Y como en tiempos de Maricastaña y remontándonos muchos siglos atrás, en nuestros días, la historia se repite en sus mismas formas, pero sin necesidad de cuantificar su intensidad porque los factores que la acompañan tienen desigual valía.
Por lo que vemos, el actual Gobierno y con Rajoy a la cabeza, tiene a bien actuar mismamente lo hiciera Azaña, tanto en cuento deja que las hordas campen a su antojo por nuestros campos y campiñas, incubando el caos y con la delicia del “cuenta cuentos” que sabe de su inicio, pero que portador de una psicopatía enfermiza y en su delirio, ignora el cómo acabarlo.
Aquella intelectualidad que le apoyaba y a los pocos meses del inicio de su gobierno, le dijo al mismo Azaña que lo encomendaba: “No es eso, no es eso”.
Todos sabemos de aquel final facilitado por la información que nos ofrecen librerías y hemerotecas, pero dificultado en su manipulación por tanto “sálvames”, belenes estebanes y tertulianos afines, todos a la caza del suculento pluriempleo.
Cuento por lo visto no aprendido pero de necesaria digestión, pues como tantas veces se dice, hay que aprender de nuestro pasado para no repetirlo. Al menos, del que nos fue inútil.
20 agosto 2012
ROSA REGÁS, LA ÍNCLITA DAMA
18 agosto 2012
MARINA ALBIOL, CONTRATO INDEFINIDO
Dicen que cada sociedad tiene lo que se merece. Llevo escuchando esto desde hace muchos años y de muy diversos modos, sople como sople el viento, sea de poniente, sea de levante, tratemos de galgos o lo hagamos de podencos. Y por su machacona insistencia, algo debe tener de cierto. Y de los barros… los lodos.
Lodos que se vierten por las calles de nuestra nación y que no contribuyen a la necesaria limpieza que nuestra sociedad demanda, légamo que al fin y a la postre, es parte sustancial de su interior.
Por ello se entiende con meridiana claridad el que más que nunca existan espacios televisivos diseñados para tertulianos comecocos, así como el vocerío de inequívocos grupos políticos que tienden al mediático panfleto en su propio beneficio, aunque sea a lo José Mª el Tempranillo cuando “dicen” que procuran por los demás. ¡A por la pela, que es lo suyo!
El ejemplo del estrafalario diputado autonómico con intenciones delictivas, pertrechado con barbada bambalina que debiera ser la de presidiario pero que actúa con entera libertad, y más como inquisidor que como alcalde de Marinaleda, su espejo, nos viene al pelo para demostrar la existencia de una ruindad incrustada en una sociedad manipulada que desde la más nefasta responsabilidad sale en su defensa, bien sea por un interés mezquino, bien por su ancestral ignorancia o bien lo sea por la facilidad con que la hojarasca de la arboleda es conducida por el viento.
Si fueron los efluvios de una revolución bolchevique lo que hiciera navegar a la sociedad de su tiempo por las marismas del cieno, encallando en las rocas de su propia destrucción, ahora son los hijos de los hijos de los hijos de aquel barro, quienes vestidos con traje y corbata o floreado vestido según su sexo y cuando la ocasión les obliga, o de circo y camiseta de bufón (o de bufona) tabernario las más de las veces, son quienes ponen traviesas a las ruedas sin ofrecer otro medio de transporte que nos lleve a buen puerto. Lo suyo es el libelo.
La diputada autonómica Marina Albiol se ha declarado cómplice de un acto delictivo. ¡Pues a la cárcel con ella! ¡Qué más pruebas!
Que bonito y fácil es tal soflama bajo su condición de aforada y sin nada que perder, creyendo que gana, pues jamás creó un puesto de trabajo salvo el de ella misma, que de seguro logrará sea de contrato indefinido desde sus juveniles años, sin dar un “palo al agua” salvo el de sus viajes por mares y océanos a cargo de los presupuestos sufragados por los demás. ¡Otra con geta!
15 agosto 2012
“MÁS DE CUARENTA”
Aquella tarde era la propicia. Eso pensaba León Valderas cuando con el móvil en la mano se repetía inmerso en la duda: le llamo o no le llamo.
La única adición de León Valderas era el internete, aunque no lo dominaba porque eso de los sistemas operativos, la memoria ram y la rapidez en las descargas, le traía al fresco. Lo suyo era el chateo. Y allí, en el canal “más de 40”, con los ojos tan abiertos como ilusionados, se pasaba horas y horas en busca de ligoteo.
Una noche tuvo la fortuna de cruzar su desvelo con un extraño nick, Ninio, que aunque le hacia pensar que era de genero masculino, resultaba muy preguntón; lo que le hizo dudar de quién en él se escondía, preguntándose al mismo tiempo qué querría y por supuesto, si sería gay. Después de largas horas dándole a la tecla, se encontraba muy a gusto tecleando con él. Y más lo estuvo, cuando su enigmático interlocutor le confesó su sexo que no era otro que el de hembra.
-¡Dame tu teléfono y te llamo!- Le pidió de inmediato León Valderas para aseverarlo, abundado que su llamada sería de escasos segundos: los suficientes para averiguar en su voz, su condición de mujer.
-¿Y si ello no es suficiente? –Le replicó ñoña quien ya le había dicho que estaba casada con un camionero, ausente en un largo viaje por esos caminos de Dios, pero lleno de burdeles en la carretera.
-Hola, soy León Valderas- Se presentó con su voz pausada pero al mismo tiempo decidida, nada exigente y de tono educado. No le hagas caso a mi nick, -escuchó como respuesta con un timbre femenino, alegre y versátil - Lo utilizo tal cual para que no me deis la lata, pues si me presento como Lolita y con lo pesados y salidos que sois los hombres, no me dejáis en paz. Me llamo Dorita, pero dime, dónde estás; yo estoy con mi hija y su novio en el apartamento de la playa.
León Valderas le rogó volver al chat, pues estaba también en su apartamento, igualmente de la playa y chateando en la terraza. Su mujer, en el salón, le alertaba León Valderas, estaba ante la tele, atenta al J.J. Vázquez y la Belén Esteban disertando ambos sobre las rimas de Bécquer, la importancia de los endecasílabos y el porqué de la “generación del 98” en un momento convulso de la Historia de España, según ambos llegaron a su convencimiento.
Ya de vuelta al tecleo y por supuesto nervioso, León Valderas cogió el camino rápido que si en las más de las veces, lleva al fracaso, en las pocas restantes de todo puede suceder. Y si el mundo es un pañuelo, en aquella ocasión, ciertamente lo fue. Dorita veraneaba en la playa de los Valles del Norte, León Valderas lo hacía en la del Sur, separadas ambas por apenas diez minutos, comunicadas por un agradable paseo y, lo que era más importante: en aquel instante por el sonido del teclado que amortiguaba el plof plof de su excitado corazón.
Qué pequeño es el mundo, se repitieron los dos. Y qué gozada que por uno de esos caprichos del internete estemos próximos en un palmo de terreno. Y mientras que León Valderas se mostraba cauteloso porque si había imaginado que Dorita podía estar en una playa de Almería o de vete a saber dónde, resultaba ser que la tenía cerca: como lo están las sábanas cima el calor de un colchón. ¿En qué estaré pensando para esta comparación? Concluyó para sí, León Valderas.
León Valderas carraspeó. Dorita, más decidida, entró a matar y le tecleó que estaba harta de su soledad en la playa, aburrida como una ostra, mirando al mar y el constante cambio del color de sus aguas sobre un desértico pedregal, más quieta que las piedras dormidas al sol. Te espero mañana por la tarde en mi playa del Norte –le dijo- He alquilado un apartamento por veinte días, hay poca gente y nadie me conoce. Mi marido no regresa hasta el viernes y mi hija querrá quedarse en el apartamento con su Javier. ¿A las cuatro y media? Bien. Llámame antes al móvil, por favor.
León Valderas carraspeo más fuerte. Y lo notó al contestarle a su esposa, que ya terminada la tele, le dijo imperativa. -¡A la cama! Qué el Vázquez ha terminado y hasta mañana a las cuatro no vuelve-.
León Valderas sonrió. Cerró el internete y le contestó. –Sí, vamos a la cama que estoy muy cansado- En su cabeza sólo dormitaba la playa de Valles del Norte con el verde esmeralda de sus aguas que a la tarde siguiente podrían ser rojizas, quizá lascivas y con el mercurio estallando el cristal que lo cubre.
Efectivamente, la tarde le era propicia. Decidido marcó en su móvil el número de Dorita. –A las cuatro y media estaré en la playa. En tú playa- Le dijo y repitió. León Valderas apagó su Iphone 4S y se fue a hacer footing, según le dijo a su esposa, mientras ésta anhelaba ilustrarse con la generación del 27, tal y como había anunciado el JJ Vázquez a quién le acompañaría la Karmele Marchante de prestigiado discernimiento.
Media docena de nubes se perdían por el placebo azul de la tarde. La brisa era una delicia. Las diferentes tonalidades de los blancos y azules y verdes esmeraldas bailoteaban sobre la mar en el que sus pequeños rizos indicaban unas corrientes dirigidas por la batuta de Aquel que hubiera creado tan celestial infinito.
La fuerza de tan inmenso útero marino se perdía en el solitario pedregal de la playa. Dos hamacas, centraban la atención a los que en grata sobremesa y en un chiringuito playero fijaban su mirada en ellas, advertidos por Cecilia que no era ni del sol ni de tan idílico marco, de lo que disfrutaban quienes no tenían nada de juvenil aspecto, más propicio éste a la refriega amorosa.
De repente, Julieta, ya cincuentona en años, emergió de la hamaca y grácil y enamoradiza se acercó aún más a su Romeo, quien de su horizontalidad surgía una barriga cervecera que a la vista de los del chiringuito ponía su punto de gracia en aquella playa con cierto toque tropical.
-Estás a gusto, mi vida, mi cielo- Así imaginaba Cecilia lo que ambos se decían, advirtiendo a sus amigos de tan furtivo lance, y ratificando su creencia cuando la una acariciaba los hombros del otro y bajando su cabeza le ofrecía el néctar de su boca con un almibarado beso en dulce frenesí, plácido y tumbado el Romeo sobre su hamaca, mientras sus manos se movían cual pulpo en su habitat natural.
-Mirad cómo lo arrulla, cómo lo toquetea, no puede ser más que un ligue. ¿Qué si no?
Y por si acta notarial faltaba, fue Ángel Restituto Galituercas quién alertó un rato después que la pareja enfebrecida y cada uno con su hamaca, se alejaban por los brumos de la orilla. Julieta hacia el norte, y su Romeo, León Valderas, ya en los últimos metros de su footing, agotado, caminando hacia el Sur.
(Nota del autor.- Casi una historia real)
12 agosto 2012
CHIMO PUIG: ¡LO QUE HAY QUE OIR!
10 agosto 2012
JUAN MANUEL SÁNCHEZ, EL DE MARINALEDA
Juan Manuel Sánchez, político, alcalde de Marinaleda y diputado autonómico por Andalucía, dice que él no ha robado en los supermercados andaluces, dice que ha “socializado”. No conozco ningún político que reconozca que ha robado. Ninguno.
Acto seguido ha amenazado con hacer lo mismo en bancos y otras empresas, sin dejar de citar a ciertas instituciones. Él ni roba ni asalta: él socializa, aunque podría haber citado un sinónimo: incendia.
Tal y como lo hicieron sus correligionarios en 1931, llevando a la II República, gobernada por políticos nefastos (los que por ella soñaron desde la ética y el respeto como bandera, avergonzados, abandonaron España) a una situación de deterioro tal, que terminó en una confrontación nacional que todo hace pensar que Juan Manuel Sánchez procura, tal y como expresaban en manifestaciones similares, por no decir calcadas, aquellos incendiarios de Mayo-31, Octubre-34 y Febrero-36. ¡Leña a la República!
Bien harían los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado siguiendo las instrucciones del Estado de Derecho, de presentar ante los jueces a semejante personaje en aplicación del Código Penal vigente. Y no por la cuantía sustraída, sino por su incitación a la violencia realizada de forma clara y manifiesta, cuyo coste para la sociedad es ilimitado, como lo son las rociadas con gasolina a cuyo vapor es adicto.
Tampoco saqueaban e incendiaban bancos o practicaban los mismos actos con las instituciones religiosas o asaltaban empresas varias sus ancestros políticos de los años treinta, pues seguramente para el de Marinaleda lo que hacían era socializar. ¡Vaya geta!
Pero lo cierto es, que pese a la deteriorada situación económica que atraviesa nuestra sociedad, de sus causas, habría mucho que hablar y no es precisamente el partido socialista quien pueda hacer como Pilatos, aunque cínicamente lo haga, ni tampoco los compañeros de viaje de éste, afines ellos al político, alcalde, diputado e incendiario Juan Manuel Sánchez en quienes se esconde el más rancio autoritarismo aún vigente en todas las naciones de su cuerda.
El actual deterioro socioeconómico que atraviesa España, nada tiene que ver, ni con mucho, con el estado de pobreza tras la crisis del 29, de cuya salida, que se produjo, ningún gobierno socialista o comunista puede presumir.
09 agosto 2012
BLANCO Y DE NIEVE
Hola, buenos días. Os cuento:
Todas las mañanas cuando me levanto mi primer deseo es el de asomarme a la ventana. A su través, veo el mar, allá a lo lejos, pero no creáis que me pierda en el aire como me sucede a ras del suelo, que aunque crea estar en lo cierto con frecuencia me siento aturdida. Y al mismo tiempo que observo la quietud de sus aguas, fijo la mirada en una nube de pájaros que como en muchos otros amaneceres pasan ante mis ojos.
Hoy me ha sorprendido ver entre ellos, que siempre son de un color entre negro y algo verdejo con tintes amarillentos, uno que destacaba porque era de un blanco níveo, límpido como la mañana. Un blanco que lanzaba destellos que le hacían brillar entre los demás. Me pareció algo sorprendente, porque nunca había visto uno igual, salvo que fuera una paloma o una gaviota de esas que planean sobre el mar.
Aquel pajarillo blanco lucía cual copo de nieve caído sobre un pañuelo de seda de vivos colores, mientras que pincelaba el limpio azul que el amanecer me ofrecía. Le fijé mis ojos y seguí su vuelo veloz que parecía huir de mí. Pero como si supiera de mi mirada y en aquel mismo instante, giró su vuelo. De inmediato me dije que sí, que vendría hacia mí. Qué tonta soy, pensé a mis once años; mira que un pájaro y en pleno vuelo venir a mi encuentro.
Sin embargo, efectivamente hacia mi se dirigió la bandada entera. Sobre los árboles de la acera y cerca de mi ventana, como a un par de metros, hay un tendido telefónico que de vez en cuando es lugar de descanso de las aves en vuelo.
Sobre él se posaron. Todos ellos, allí detenidos. Fijaron su pico al mar, menos el blanco, que de un pequeño brinco y sobre el cable, sin tropezar en sus patas, dio media vuelta y buscándome me encontró. Nuestras miradas, al menos la mía y me fascinó que igualmente fuera la suya, se cruzaron plácidas, mientras yo sonreía. Mi nuevo amigo agitaba sus alas, como gesto alegre; creo que como respuesta, aunque no acertaba a ver el guiño de sus ojos que parecían estar quietos, como si nada dijesen.
¿Sería posible que mi imaginación bailara abrazada a la realidad? Me pregunté.
Pero allí estaba tan extraño personaje ante mi ventana, mirándome a los ojos, quietos los suyos, sin descaro, pero bailoteando sus alas.
¿Qué querrá? Me pregunté de nuevo.
Le mandé un beso junto al aplauso de mis frágiles manos y a su chasquido, todos los pajarillos levantaron el vuelo. Todos menos él. Que me buscaba allí quieto, agitando sus alas como muestra de que me hacían caso y que parecía que algo quería decirme. Al final lo entendí.
Aquella mañana me sentí feliz, pues me hallaba correspondida y creo que por primera vez.
07 agosto 2012
YA QUE EL PISUERGA PASA POR VALLADOLID
03 agosto 2012
RESPUESTA ABIERTA AL SR. ALGEMISENC.
Creo que el comentario efectuado por un seguidor de este blog, Sr. Algemesinenc, se merece mayor espacio y a ello me dedico.