Si esta declaración de intenciones se hubiese cumplido, con seguridad la historia de España de los últimos ochenta años estaría escrita de forma diferente.
Por desgracia, su noble y necesaria llamada a la ciudadanía apenas duro veintisiete días, tras los cuales, el Gobierno, “mirando hacia otra parte”, posibilitó que sus propias intenciones se fueran al garete.
Ello explica muchas de las cosas que sucedieron después -por otra parte muy fáciles de entender- menos para quienes optan por la manipulación histórica utilizando los panfletos de la falsedad.
Y escrita en “valenciano” sin normalizar para que lo comprendieran nuestros convecinos.
A pesar de ello no todos lo entendieron. Y así nos fue.
3 comentarios:
No consigo leerlo. Acabo mareado. Casi, casi mejor lo transcribes tú, si te parece.
Iván
Iván, pon el ratón encima del manifiesto y haz un doble clic, podrás guardarlo y leerlo muy bien.
Un abrazo
Ya lo hice antes y ni así. Buscaré una lupa.
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