EL BLOC DE JOTA COB
21 febrero 2025
EL RELATO
27 enero 2025
SOMOS LO QUE FUIMOS
16 agosto 2023
UNA SOCIEDAD ENFERMA
El cuerpo humano es atacado por un llamado virus que se instala bien en su sistema nervioso, bien por sus venas y arterias, o bien por sus músculos, aunque en otras ocasiones también por sus huesos.
El resultado nos lleva a un escenario nunca deseado: el de un cuerpo humano enfermo.
Pero éste fenómeno también se repite en la sociedad, y las causas igualmente son múltiples.
La que nos ocupa viene facilitada en la actual urbe española por una persistente corrupción mediática a la que se suma la instalada en el poder judicial que ha posibilitado el que en estos días un prófugo de la justicia se haya convertido en el árbitro de nuestra vida política, además, con el viento a favor de un VAR televisivo, que niega el evidente penalti que muy bien visto por toda la sociedad, una de sus partes lo niega en aras de un revanchismo que corre por la piel de toro, como si del peor de los virus se tratara.
Sólo una sociedad enferma, desnortada y sin defensas, es capaz de lograr en unas elecciones a Cortés Españolas que un prófugo, convertido en Eurodiputado gracias a unos órganos judiciales corrompidos hasta su propia médula, se convierta en dueño de sus designios para elegir a un Presidente del Congreso, a un Presidente de Gobierno y con unas facultades muy superiores a las que goza nuestro Jefe del Estado. Se consulta así mismo.
Lo dicho, una sociedad enferma que ha hecho posible en el pasado 23J que un virus maligno, el del revanchismo, se instale entre nosotros para conseguir su fin pretendido.
Que no es otro que el de un río revuelto que sólo procura beneficios para quien desde Waterloo, eligió el oficio del astuto pescador.
19 septiembre 2020
¡ BASTA YA !
¡BASTA YA!
Fallecido Franco, la anexión de España a la Comunidad Europea, en todo orden, era de necesidad; y no sólo en lo comercial como hasta entonces.
Las Cortes Españolas, los sucesivos gobiernos y el Jefe del Estado faenaron para ello. El éxito fue innegable, refrendándose una transición política cuya aceptación corría favorablemente en el boca a boca del pueblo español. Incluso allende los Pirineos y Ultramar.
Nadie dudaba de las atrocidades de uno y otro bando durante la guerra civil, de las que decididamente se pasó página y hacia el olvido.
Particularmente, pienso y creo que bien, que lo más noble de la contienda -siempre existe la nobleza ante cualquier suceso- estuvo en las trincheras, mientras que las páginas negras se escribían en las poblaciones. Se moría en el frente en defensa del puesto, mientras se asesinaba en las ciudades.
Tras una Constitución de consenso nació la España de la reconciliación que disfrutamos y tuvimos durante casi treinta años.
Hasta que un infame Zapatero ordenó reescribir la historia. Y no sólo ante el dato objetivo, que también, sino con la vuelta a la escena de viejos bandos: el de los buenos y el de los malos. Donde los "malos" de antaño eran los "buenos" de ahora y los "buenos" de entonces se convertían en los "malos" de nuestros días.
Pasados casi cincuenta años con la aparición del Coletas: la tabla de salvación de Pedro Sánchez, surge entre ellos un matrimonio de pura convivencia avivado desde la voracidad de lo más rancio de nuestra piel de toro, en agravio, con el mayor de los descaros, del pueblo español, que en su indefensión se encuentra ante un escenario dañino para la convivencia española, al que gozosamente aplauden los más sectarios de la sociedad obligados por el telediario.
Y por todo ello digo: ¡Basta Ya!
20 abril 2020
MI OJO TURCO
26 septiembre 2019
MARÍA JESÚS Y SU ACORDEÓN
16 febrero 2019
QUE SI CHURRAS O MERINAS: -LA GRAN FARSA DE #ELPROCÉS
27 febrero 2018
EL PROCÉS
Conocido como “el procés”, ha tenido sus tempos. No obstante, la sinfonía al logro de la tormenta perfecta ha sido siempre la misma. Su escenificación durante los últimos años ha sido centro de atención en telediarios y en tertulias televisivas con veladas inagotables; en primeras, en segundas y en terceras columnas de los diarios más acreditados, hasta llegar al hastío, se han rubricado con las mejores plumas, aunque como suele decirse no todo el monte es orégano.